Sin duda lo mejor de esta receta además de su textura cremosa en boca y que resultan fáciles de formar sin que se nos peguen a todo, es la sencilla elaboración que no forma grumos. Y eso, en una bechamel lo es todo, o casi.
Si te agrada el resultado final tan sólo tienes que cambiar el ingrediente base para obtener otros sabores: jamón, pollo, cocido, chorizo, etc.
Este sería el proceso:
1. Pon a desalarIntroducir un género en abundante agua fría durante tiempo preciso para favorecer la pérdida de sal. las migas de bacalao en abundante agua fría de 2 a 3 horas cambiando el agua un par de veces. El punto de sal deseado dependerá del grosor de las migas y del tiempo que las tengas a remojo. Una vez desaladas escurre y seca apretando ligeramente para eliminar el exceso de agua.
2. En un recipiente adecuado vierte la leche fría, añade pimienta blanca molida, nuez moscada al gusto, la maizena y una pizca de sal, pero poca, sobre todo si tenemos en cuenta que el bacalao aportará también un punto de sal. Remueve bien con el batidor de varillas y reserva.
3. Ahora en una olla1º.- Vasija de barro o metal alta y ligeramente estrecha. Con asas.
2º.- Plato regional de varias comunidades españolas. Especie de cocido. amplia vierte el aceiteGrasa obtenida de elementos vegetales tales como olivas, soja, girasol, etc. de oliva y calienta a fuego medio. Agrega el ajo picado y fondea unos segundos e incorpora a continuación la cebolla finamente picada, en brunoiseCorte de hortalizas y verduras en dados muy finos y regulares. por ejemplo. Rehoga un par de minutos, hasta que la cebolla comience a dorarse ligeramente.
4. Añade a continuación la mantequilla dejando que se derrita bien, el bacalao previamente picado en dados menudos y por último la harina. Remueve unos segundos hasta formar una pasta con estos ingredientes. Retira del fuego y deja templar ligeramente.
5. Sobre esta mezcla vierte entonces la leche con el resto de ingredientes que habías preparado anteriormente. Remueve bien con ayuda del batidor de varillas hasta que se haya mezclado todo y coloca entonces sobre el fuego. Ahora es muy importante no dejar de remover bien para evitar la formación de grumos.
6. Tras unos minutos al fuego comprobarás que la pasta comienza a espesarDar más consistencia a un líquido, hacerlo más espeso.. En este momento puedes cambiar el batidor de varillas por una espátulaPaleta larga o triangular y más ancha que se emplea para voltear géneros, recubrir con cremas o mezclar alimentos. que será más cómoda para trabajar esta bechamel cremosa. Cuece a fuego medio al menos 10 minutos, hasta que compruebes que la pasta tiende a despegarse de las paredes de la olla1º.- Vasija de barro o metal alta y ligeramente estrecha. Con asas.
2º.- Plato regional de varias comunidades españolas. Especie de cocido..
7. Prueba el punto de sal y si es necesario rectifica con sal y especias. Añade el perejil picado, retira del fuego y deposita la pasta en un recipiente ligeramente engrasado con un poco de aceiteGrasa obtenida de elementos vegetales tales como olivas, soja, girasol, etc..
8. Deja enfriar y guarda en frigorífico al menos 24 horas antes de formar las croquetas.
9. Recuerda que para formar las croquetas primero debes amasar la pasta. A continuación cortar en pequeñas porciones, formar con ayuda de las manos y terminar por empanarCubrir un género con una fina costra pasándola por harina, huevo batido y pan rallado. pasando únicamente por huevo batido y pan rallado (No es necesario enharinarPasar un género por harina. previamente). Si te sobran, las puedes congelar y tendrás un aperitivo que te solucionará más de una comida.